LA SOLEDAD
Tenemos que diferenciar, entre estar solo o sentirse sólo, la soledad buscada, es calma, paz, tranquilidad, armonía… y es muy necesaria.
La soledad, nos sirve para conocernos mejor, para poder hacer todo aquello que realmente nos apetece, o para no hacer nada. Solamente observar. Y lo más importante, estar con nosotros mismos.
La soledad, nos permite regresar a ese estado meditativo, que te va mostrando el camino hacía dentro, conectando con tu ser interno, para ser, lo más honesto posible contigo mismo.
El ser humano está dotado de unas alarmas internas. Cuando las situaciones, no las gestionamos con coherencia, esas alarmas se disparan.
Para ser escuchadas, no te lleves al límite.
Busca esos momentos de soledad y escúchate.
Se sincero contigo mismo, hasta que consigas esa coherencia entre: Pensar, Sentir y Actuar.
Estos tres ingredientes son los necesarios para amarte plenamente pues el tiempo de figurante se acabó.

AGENDA
- No hay eventos programados.